“Se trabajó muy fuerte, principalmente en preservar la seguridad humana y las estructuras –detalló García-. Se tuvo que dejar correr el incendio por la imposibilidad de acceder por la topografía y la altura tremenda de la vegetación”.
Además, explicó que se trata de especies de alta combustión, como las retamas y zarzamoras y “varias veces tuvimos que escapar, porque el fuego nos encerraba, porque había muchísimo viento”.
Algo más tranquilo, indicó que este viernes “el panorama es otro” y queda “un foco activo en la zona de la Ruta 74, donde estamos trabajando seis dotaciones, más el apoyo del avión hidrante y un helicóptero y estamos viendo si lo podemos controlar”.
En el enorme siniestro, trabajaron todas las dotaciones disponibles de los Bomberos de Tandil, con el apoyo de Bomberos de Vela, Azul, Rauch, Cariló y Mar del Plata y se estima que la afectación alcanza hasta el momento alrededor de 250 hectáreas, mientras que en la larga jornada de ayer (jueves), los servidores públicos trabajaron en dos frentes, con herramientas de mano, priorizando alejar las llamas de las viviendas, lo que afortunadamente, se consiguió.
Fuente: ABC hoy