La Semana Mundial de la Lactancia Materna se celebra del 1 al 7 de agosto en más de 120 países, con el objetivo de fomentar y apoyar la lactancia. Dicho evento está organizado por WABA (Alianza mundial pro Lactancia Materna) junto a la Organización Mundial de la Salud y Unicef.
Este año el lema de la campaña es «Proteger la Lactancia Materna: Un compromiso de todos/as» y está centrado en la importancia de evitar la discriminación de las madres lactantes en los diferentes ámbitos, generar políticas públicas y apoyo del entorno social.
Hablar de responsabilidades compartidas de todos y todas es saber que no alcanza con el deseo de las madres o padres lactantes, y requiere que nos informemos, anclemos, involucremos y animemos a acciones colectivas.
La lactancia materna es clave durante los primeros años de vida, es un alimento que contiene más de 300 nutrientes que son necesarios para el desarrollo del bebé. Genera anticuerpos que los protegen de distintas enfermedades. La Organización Mundial de la Salud recomienda lactancia materna exclusiva hasta el sexto mes de vida y luego complementar con alimentación al menos hasta los 24 meses o cuando la madre y el niño así lo decidan.
No solo tiene beneficios para la mamá y el bebé también para el ambiente porque es 100% ecológica. Para dar la teta no es necesario utilizar agua potable o productos químicos para lavar mamaderas. Otro beneficio es que está al alcance de cualquier economía.
Asegurar prácticas de cuidado que resguarden la lactancia es fundamental en épocas de pandemia. Se ha visto el impacto que generó la separación innecesaria por Covid-19 que puso en peligro la continuidad de la lactancia.Así mismo quedaron demostradas las falencias que tienen los sistemas laborales y lo complejo que resulta complementar lactancia, crianza y trabajo remunerado.
Las tasas mundiales de amamantamiento, indican que los recién nacidos que inician la lactancia en la primera hora de vida no superan el 43%, y solo el 41% de los lactantes son amamantados exclusivamente. Solo el 70% continúa siendo amamantado al año, disminuyendo un 45% a los 2 años de edad. Porcentajes bajos que preocupan.
Es importante que las familias puedan contar con información actualizada. El acompañamiento por parte de los profesionales de salud, tiene un rol clave, por eso es necesario que tengan conocimientos actualizados, sean empáticos y acompañen de manera respetuosa el deseo de la familia durante el proceso de lactancia.
Por Sol Argüelles, puericultora (@solarguelles.puericultora)
Telám