Ante los variables precios internacionales a causa de la invasión de Rusia a Ucrania, los productores no quieren desprenderse del grano, aseguró la Federación Argentina de la Industria Molinera. Desde el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca afirmaron que el abastecimiento está garantizado.
El presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM), Diego Cifarelli, advirtió este jueves las dificultades que enfrenta el sector en la actualidad para adquirir trigo a causa de la volatilidad de los precios, y solicitaron asistencia por parte de los exportadores para poder contar con la materia prima.
«Estamos a la espera de una asistencia de trigo por parte de la exportación, más allá de seguir intentando por todos los medios convencer al productor de que venda el trigo, que es un gran momento para hacerlo«, dijo Cifarelli en diálogo con Télam.
Este miércoles FAIM, el sector exportador de granos y funcionarios del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, mantuvieron una reunión en la cual se planteó esta problemática y se le pidió a las empresas exportadoras que venda trigo a los molinos. Según comentó Cifarelli, el principal problema consiste en que, ante la volatilidad de los precios internacionales del trigo a causa de la invasión de Rusia a Ucrania, los productores no quieren desprenderse del grano.
Para el dirigente empresario, esta actitud es errónea, ya que «el precio actual tiene un premio producto de la guerra, que solucionado este conflicto, volverá todo a la normalidad, tanto el valor del cereal como el de la harina» y no podrán captar la ganancia.
«Seguimos atrás del trigo», remarcó el titular de FAIM, al tiempo que sostuvo que hoy la industria «está asistiendo a las panaderías y la industria, con una harina que estaba la semana pasada alrededor de los $1.300 la bolsa de 25 kilos y que tras el fuerte aumento de esta semana, hoy está a $ 1.500″.
«Hoy encontramos un mercado de harina abastecido, con clientes que quieren comprar más de lo que compran habitualmente y es ahí, donde al decirles no, enseguida se genera una especie de temor de que está faltando, pero no es así, sino que estamos trabajando sobre una demanda normal», concluyó.
El miércoles Julián Domínguez sostuvo que, ante esta situación global, «hay cadenas que en el proceso de industrialización necesitan, en esta coyuntura, una atención» y puso como ejemplo de esto lo que sucede con el cereal. «Por ejemplo el precio del trigo, con el cual la molinería está teniendo dificultades. Desde la semana pasada estamos trabajamos para garantizar que tengan el trigo que necesitan», dijo el ministro.
«Bienvenidos los precios altos, pero veremos cómo hacia adentro ordenaremos las cosas. El fondo anticíclico del fideicomiso de trigo y maíz que trabajamos es un instrumentos en el cual no vamos a tocar retenciones, pero sí tenemos que asistir de alguna manera al sistema de la producción», concluyó Domínguez.
Telám