Se trata de Bulnes, localidad de 1.500 habitantes. El intendente, a quien se le murió su padre por Covid-19 , aseguró que hubo una relajación y un incumplimiento de las medidas.
La mitad del pueblo cordobés de Bulnes, ubicado en el departamento Río Cuarto, está bajo aislamiento por el brote de contagios de coronavirus que se registra desde las últimas semanas.
Si bien durante gran parte de la pandemia fue considerada como «zona blanca» porque no contaba con contagios, hasta la fecha acumula 123 infectados y dos fallecidos, en un total de 1.500 habitantes.
«Entre un 40 y 50 por ciento de los vecinos está en cuarentena estricta por contacto estrecho y por los últimos casos», confirmó a Cadena 3 el intendente Martín Toselli, quien perdió a su padre por Covid-19.
Explicó que hubo dificultades para trazar el caso cero, ya que se encontraron con un relajamiento general de la sociedad respecto a las medidas sanitarias y por el vínculo estrecho con otras localidades cercanas del sur provincial, como Coronel Moldes y Sampacho.
«La relajación llevó a que vieran la pandemia como algo muy lejano y hubo una irresponsabilidad social con las reuniones sociales. Esto provocó un estallido de casos de un nivel al alto en poco tiempo y respecto al tamaño de la población», señaló.
Cadena 3