El 1 de enero de 1990 se produjo uno de los hechos más resonantes de la historia de Tres Arroyos, una niña de 9 años que fue identificada como Nair Mostafa fue encontrada muerta en la madrugada de ese primero de año sobre las vías del Ferrocarril Roca. El caso lleva más de tres décadas impune.
Un hecho que enlutó a toda la ciudad y fue noticia a nivel nacional, una madre que no fue escuchada en la comisaría local, pero si en una radio local porque Evaristo Alonso director se hizo eco y cedió el aire de LU 24 para informar sobre lo que estaba sucediendo, una búsqueda masiva dejando de la lado, algunos, el brindis de Año Nuevo, una poblada, una cúpula policial que fue removida de su cargo, móviles quemados y días de angustia y alerta.
Nair salió de su hogar para dirigirse al Club Huracán pero nunca llegó… a 32 años de su muerte, no hay culpables en este caso que dejó una enorme huella en la comunidad.
El equipo El Mirador se dirigió hasta Tres Arroyos para dialogar con Héctor Asef periodista que estuvo aquel día cubriendo para Lu24 lo que sucedía.
“Un golpe para la ciudad y comunidades vecinas por las características del caso que fue el asesinato de una niña de 9 años y por otro lado el momento en el que se produjo que fue un 31 de diciembre donde las familias están reunidas para celebrar, eso se traduce en una sorpresa inicial y un error posterior que por mucho tiempo fue una especie de signo para Tres Arroyos porque en cualquier lugar donde mencionabas de donde eras te hacían referencia a este caso.
Yo me entere después porque estaba en una reunión familiar y la verdad es que no escuchamos la radio, de pronto apareció alguien a brindar cerca de la 1 de la mañana y nos contó lo que había sucedido.
El cuerpo de Nair fue encontrado después de las 2 am, lo que supimos es que la nena salió para ir a la pileta del Club Huracán después de almorzar cuando no volvió la mamá (Liliana Fuente) comenzó a preocuparse llamó a las amiguitas pero nadie la había visto, siguió la búsqueda y pocos minutos antes de las 12 de la noche fue a la comisaría y no la atendieron, volvió más tarde y le dijeron que estaban preparando el brindis de Fin de Año que no los moleste, nadie le prestó atención.
Entonces acudió a la radio a denunciar la situación de que no la atendían y esto llegó enseguida a oídos del director, en ese momento Evaristo Alonso que estaba con su familia en su casa, rápidamente se involucró en lo que estaba pasando y habló por la radio que no era común en él, le pidió a la gente que saliera a buscar a Nair de hecho el se sumó con amigos.
Nair fue encontrada a la madrugada en unos pastizales pegados a la Escuela 16 y ahí fue donde se produjo una situación que luego fue derivando en una tención muy importante frente a la comisaría donde se quemaron 16 autos, los policías cerraron la dependencia, hubo piedras un caos total” relató en el inicio el periodista.
Nair salió de su casa el 31 de diciembre de 1989 a las 15. Tenía que caminar 10 cuadras para llegar hasta el Club Huracán, donde iba a la pileta, y era un camino que conocía de memoria. Llevaba puesta su malla rosa, la misma con la que horas después la encontraron asesinada.
Hubo dos Tres Arroyos, uno que brindaba y otro que se sumaba a una búsqueda desesperante, “Evaristo Alonso fue un hombre al que admire toda mi vida porque fue un líder para la ciudad a través de los medios, en ese momento lo acompañó al intendente Correa que era abogado quien se sentía desbordado por la situación, Alonso le dijo que lo llamará la gobernador Cafiero para que de alguna manera intensificará la investigación no hubo una respuesta contundente es la realidad.
En ese momento el gobernador estaba inaugurando el operativo Sol en Mar del Plata, pero como Alonso era el presidente de ARPA (Asociación de Radiodifusión de Periodistas de Argentina) o sea que tenía contacto directo con todas los medios naciones le expresó que de no venir a Tres Arroyos todos se harían eco de su respuesta por priorizar una inauguración y no la situación de caos en nuestra ciudad. Vino al final con custodia, pero no la paso bien, se reunió con el Intendente prometiendo que el caso sería resuelto y ya pasaron 32 años.
A lo largo de las semanas posteriores se detuvieron a varias personas pero sin sentido, gente que no tenía nada que ver con el hecho en sí.
El juez Balaguer era el encargado de la causa, una persona excéntrica que no cumplió y estiro la situación, nunca más se supo nada a pesar de las conjeturas que aparecieron porque se dijo de todo pero nada claro”.
Entre la tristeza y la desazón por no tener una respuesta del crimen de su hija la madre de Nair recibió amenazas al igual que el director de la radio, “la madre se fue de Tres Arroyos, yo pude hablar con ella en una entrevista muy breve y la vi muy triste, desesperada también porque se decía que su pareja estaba involucrado en la venta de estupefacientes y que este crimen podría haber sido un ajuste de cuentas, entonces se cuidaba mucho al hablar”.
Durante la entrevista Héctor se refirió a la labor policial, “se le perdió el respeto a la fuerza policial, después nadie quiso ser más comisario porque la gente tenía una especie de aprensión contra ellos y los comisarios sabían que era un lugar muy difícil para relacionarse, se decía que cuando querían castigar a algún jefe lo mandaban para acá.
En ese momento hubo cosas que no cerraban, desaparecieron elementos importantes para esclarecer el crimen o sea cuando se quiere desviar la información hay modos para hacerlos, yo no creo que la policía haya tenido que ver con el asesinato, pero fue cuestionado su accionar porque no fue inmediato”.
Un accidente dudoso
El periodista Alonso falleció en un accidente poco después del crimen de Nair Mostafa, “él cuestionó el accionar y lo hizo desde su lugar como periodista porque quería que el hecho se esclareciera.
Lamentablemente murió en un accidente poco claro, viajaba ese día a Buenos Aires justamente por sus actividades en la asociación, según la persona que viajaba con él sintió una frenada brusca, vio una luz muy fuerte que venía hacía el auto y por la colisión falleció inmediatamente, muchos adjudican la posibilidad de un atentado pero nunca se supo nada”.
Para el final Asef fue contundente ante la pregunta de que si Tres Arroyos había olvidado…, “No olvido, es un tema que lo tiene latente porque un caso emblemático, en cualquier lugar del país te lo mencionan, es un reflejo, una huella que no se borrará jamás y deseo que se haga justicia en algún momento”.
María del Carmen Remedio
Lorena Arlan
Imágenes actuales de como se encuentra hoy la dependencia policial, el balcón de la casa donde vivía Nair con su madre, la vía del ferrocarril donde fue encontrada en 1990 y el mural que fue pintado a pocos metros.