La Iglesia Evangélica de Benito Juárez sigue trabajando en época de pandemia, de a poco fueron retomando algunas actividades con los protocolos del caso como la Escuela Bíblica que comenzó nuevamente, el Ropero Solidario y por supuesto las ceremonias los días jueves de misa y oración a las 18 hs y los domingos a las 10 y 18 hs culto general.
En este período también se llevaron a cabo obras edilicias, se cambio el piso de madera y se colocó una reja afuera del templo, lo próximo es bajar el techo y pintar ya que en el mes de septiembre el edificio cumple 100 años de su fundación.
Además sigue agendado en el calendario el viaje a Chaco que no se pudo realizar en estos últimos dos años pero están viendo la posibilidad de cumplirlo en este 2021, de todas maneras los misioneros están recibiendo ayuda pero es necesario el contacto presencial.
Hablamos con Celina Del Giorgio y Sonia Carelli quiénes nos dieron detalles de la actividad que se está realizando durante la semana en el templo.
«Tenemos la actividad del ropero los días martes, jueves y sábado de 10 a 12 horas durante este mes y en junio veremos cómo nos va con el frío pero hay mucha necesidad y tratamos de acompañar de la mejor manera, la gente es muy solidaria y nos trae muchas cosas que ponemos a la venta para la comunidad.
Por otro lado la iglesia funciona respetando el protocolo, tenemos un lugar grande para utilizar y tratamos de acomodarnos con la distancia del caso, la obra del piso comenzó el año pasado en enero hicimos una feria de artículos para el hogar donde se recaudó bastante, también se vendió parte del piso de madera entonces con esos esfuerzos se pudo concretar el cambio porque no estaba en condiciones.
Seguiremos en una segunda etapa con la parte de electricidad, pintura interna y externa, además de que se colocó la reja gracias al aporte de la gente que siempre esa colaborando» nos informó Carelli.
Por su parte Del Giorgio dijo, «el fin de semana pasado comenzamos con las actividades para niños, jóvenes y adultos de enseñanza es como si fuera el catecismo pero nosotros la llámanos Escuela Bíblica, es en grupos reducidos o sea trabajamos con burbujas en distintos salones y días.
En este contexto nos encontramos con que la gente en este tiempo necesita del apoyo espiritual, este espacio fue muy bien recibido y estamos muy agradecidos que nos acompañen».
Sonia Carelli agregó, “Se toma la fiebre antes de entrar, utilizamos alcohol continuamente, se sientan dos por banco y si es grupo familiar tres por ejemplo pero todo con mucho cuidado para no perder este espacio.
La pandemia es muy difícil llevar adelante tengo una amiga que dice que “cada cual la vive como puede” porque la verdad que esto nos sorprendió a todos pero bueno Dios no está cuidando porque el mismo para todos. El domingo tuvimos un mensaje que está escrito por Marcos en la Biblia, en un momento el Señor se duerme en su humanidad muy cansado porque trabaja con mucha gente, se duerme en la barca, se levanta una tormenta y lo despiertan, entonces reprende al mar y al viento.
Eso me impacta mucho por el poder de Dios y creo que esto será un poco así, tenemos que rogar y volver el rostro a Dios y que un día se levanté y diga: basta pandemia deja a mi pueblo tranquilo, ese ojalá que se convierta en oración”.
Un tiempo distinto para todos, un aprender día a día que hizo que muchas personas se acercarán a recibir esa ayuda espiritual, una palabra de fe tan necesaria, “tenemos el acompañamiento continuo, muchos leen lo que se publica en redes sociales que ha sido una herramienta muy necesaria, después varios escuchan sermones por you tuve y se comparten. Pero en medio de esta pandemia se busca el fortalecimiento espiritual, nosotros cuando se acercan a la iglesia tenemos evangelios que reciben muy bien cuando se los ofrecemos, vemos que hay un mover de la gente para buscar algo más allá de la tierra, cuando nos pega la realidad uno se da cuenta que pasajera es la vida y debemos aferrarnos a las cosas importantes”.
María del Carmen Remedio