Una vuelta por la ciudad nos hizo dar cuenta que la única calesita de la ciudad estaba en funcionamiento por estos días, ella volvió para hacer feliz a los más peques que este año no pudieron utilizarla cómo en otros años. La calesita ubicada en la Plaza Mitre más iluminada que nunca giraba y giraba con música de fondo para hacer más alegre la estadía de algunos niños que se subieron por primera vez después de varios meses, al igual que todas las actividades acá también se cumple el protocolo de higiene y seguridad, sólo pueden ingresar cuatro a los que se les coloca alcohol y cada vez que bajan se desinfectan los autitos, los caballitos y demás cosas que están en la misma.
La calesita comenzó a funcionar el último 14 de noviembre y con la época linda las familias disfrutan del aire libre sumando está posibilidad, obviamente preguntamos si la sortija estaba disponible y los dueños nos dijeron que sí porque no hay calesita sin ese objeto tan preciado.
Fue una grata sorpresa, quizás la imagen del día en tiempos donde los niños cumplieron cómo nadie el aislamiento social, entonces una más Sra. Calesitera.